Una caracteristica de Hablan por la Espalda, es que experimenta revoluciones interiores. Desde los inicios hardcore punk a este disco el grupo fue mutando en forma permanente, preservando, intacto, un mismo espíritu de pureza músical e ideológica y devoción por lo genuino. Ha sido siempre de común acuerdo, en filas de la banda, que mantenerse apegados a un género durante los más de 15 años de trayectoria que ésta lleva, sería mentirse a sí mismos.

Como producto de la continua experimentación-investigación y la curiosidad por seguir los lazos de la eterna cadena de influencias, HPLE llegó, en 2009, a grabar Macumba en los míticos estudios Sondor de la ciudad de Montevideo. De antemano, el desafío presentaba una serie de singularidades en relación a todo el material registrado anteriormente. Sería el primer disco de la banda a editarse por un sello uruguayo (Sondor), el primero en incluir un 100% de líneas vocales en español y, a su vez, el registro definitivo de una serie de inéditos sonidos autóctonos y percutivos que los integrantes habían estado incorporando durante los cinco años previos a la grabación.

Una posible explicación:

"Macumba es el resumen de este largo período donde nos pasó de todo: giras por Brasil con todo lo que ese país te sacude, mudanzas (a barrios ventosos donde la música está en la calle), empezar a escuchar mucha música local de la era pre dictadura y blues mucho blues, antros, borracheras, experimentación con sustancias, encuentros com mujeres buenas y malas, visión de películas y documentales sobre gente demente, libros de historias de músicos, de grupos, de leyendas, futbol, cancha, piñatas y todo eso va pegando, te vas transformando, rehaciendo".

La ansiedad y la expectativa por comenzar a plasmar el material acumulado era tan grande entre los músicos, que el día señalado para empezar se anticiparon - sin querer - por 45 minutos a la apertura del estudio y tuvieron que esperar en la vereda de la calle Río Branco (con todos los equipos amontonados), por la hora indicada. Una vez adentro, ya organizada la estructutra, llenaron el lugar de velas de San Jorge y se abocaron a aprovechar las bondades del estudio en el cual se habían grabado todos los discos uruguayos que la banda adora.

Existía un pacto más allá de lo estético, espiritualmente el registro representaba para los miembros, la oportunidad de revertir antiguos males. Al ser cuestionado acerca del porqué del nombre Macumba, por un medio virtual, el vocalista respondió lo siguiente:

"En HPLE durante años consideramos que teníamos una maldición que pesaba sobre nuestro nombre. Los motivos que nos llevaron a creerlo fueron varios: accidentes previos a recitales importantes o comienzos de giras (2 tajos en manos, una mano quebrada, costillas fisuradas, etc.), también tuvimos algunos show en los cuales habíamos depositado altas expectativas cancelados por moivos ajenos a la banda, y tuvimos integrantes del grupo que abandonaron por creer que ser parte de HPLE era inadecuado para su salud mental. Esto, sumado a los años de destrato de parte de sellos y radios en nuestro país (1996-2008); un boicot declarado al grupo a través de cadenas de mails sugiriendo que éramos una banda de vándalos destructores de escenarios - que repercutió en que más de un boliche montevideano nos prohibiera tocar en sus instalaciones - más un sinfin de ocasiones en que tuvimos que lidiar con los promotores de shows más tránsfugas, nos terminaron de convencer de que precisábamos exorcizarnos, y lo hicimos a través de la música. Hicimos este disco con la convicción de que implicara la curación de los males".

Cuando el disco estuvo finalizado HPLE se trasladó a Valizas para tomar la foto de tapa y en la playa, de noche, llevó a cabo un rito definitivo de fe en lo consumado. Oraciones en la arena. Independización de la música. Un nacimiento. Desde el momento, la banda le otorgaba vida propia a Macumba y, desde afuera, visualizándola como una entidad autónoma, pasaba a creer en ella como el comienzo de su nueva era.